lunes, 1 de junio de 2009

REFLEXIÓN POLISÉMICA SOBRE NEGRAS ACTITUDES CUBIERTAS DE FALSA POLICROMÍA

Fotografía: Kaiko de su colección "Marroc",
www.kaiko.es


Gustaba.
Sí, la verdad es que me gustaba
contemplar con los ojos de la ilusión,
a veces blanca, a veces negra,
el multicolor paisaje de la intuitiva reacción
que multiplica el daño por mil.
Me gustaba estar cerca
porque creía que podía cambiarlo.

Visualizar la inocencia que hace daño
multiplicado por un millón,
y asimilarlo hasta que el dolor
se hace impulso de vida
diluido en la sangre del corazón.

Me ha gustado.
Sí, irremediablemente me ha gustado
verte distinguir en el abstracto lienzo
del arte que refleja nuestro mundo
y todo alrededor,
que pocas pinceladas son blancas o negras,
sino más bien lo parecen a lo lejos
en las miradas con gafas de cristal
de algún color;
me ha gustado
que al acercarte a verlo
tu rostro ha reflejado la rabia del que descubre
que tanto el blanco como el negro
expresan en la proximidad
su verdadera gama de impresión en grises.
El blanco, que no lo es tanto,
oculta una capa de negros mas gris.
El negro, que no lo es tanto,
desplaza entre surcos un blanco
que si la vista no engaña
casi parece gris.